La madrugada era fresca , una brisa gélida paseaba por todas las calles de Andujar rodeando a todos con tal fuerza , que obligaba a los presentes a ajustarse bien las cazadoras y abrigos al cuerpo, para así evitar el desagradable mal estar que provoca el frío.
En esta ocasión el punto de encuentro como ya es tradición ,eran los alrededores del bar “el sordete” ,fueron muchos los que de Jamilena realizábamos peregrinación en ese día y aunque no todos los grupos salimos a la vez , tuvimos ocasión de vernos, conversar y desearnos suerte para el reto al que nos enfrentábamos .
El grupo con el que un servidor tuvo el gusto de recorrer las entrañas de Sierra Morena, fue el de José, en esta ocasión contaba con más miembros que siete días atrás debido a a la incorporación de varios peregrinos.
Consolamos nuestros estómagos con un desayuno ligero, y seguros de que “estábamos todos los que éramos” ,José entonó el particular grito de “guerra” ,utilizado por los “caminantes de La Morenita”,para hacernos saber que comenzábamos la marcha .
No hubo contratiempos, durante el primer tramo, nuestro particular enemigo, el frío, fue combatido avivando las piernas y pronto la ciudad cedió paso a la estampa serrana, con el cielo cargado de estrellas, aunque escondida a la vista por la madrugada ,pero evidenciada por los olores a pino ,romero , tomillo y las otras plantas que residen en la sierra .
Llegamos a San Ginés iluminados por la tenue luz del amanecer nos recibían miles de pajarillos que parecían saber de nuestra presencia pues trinaban alocados con los primeros rayos del sol.
En la llanura, se encontraban algunos miembros de la Peña Iliturgitana ”Peregrinos del Alba” ofrecían desinteresadamente diferentes alimentos para los que caminábamos; ,también el personal de “Protección Civil” atendía a aquellos andarines que hubieran sufrido algún percance ;
según fuimos informados posteriormente por uno de los miembros organizadores ,este es el tercer año que esta asociación peregrina organizan este evento con el objetivo de fomentar e inculcar el espíritu peregrino hacia el Santuario a jóvenes y a no tan jóvenes .
Los vehículos de apoyo y sus conductores,”fieles escuderos” que ese día fueron José y Jesús permanecían a la espera pacientemente, con todo preparado para el desayunar.
Comimos y bebimos hasta quedar satisfechos, el segundo tramo iba ha durar bastante y, debíamos estar bien alimentados para afrontarlo con energía .
Tras el descanso el grupo se vio de nuevo aumentado ,en este caso ,la media de edad ,que hasta el momento estaba entorno a los treinta años ,bajo de forma espectacular debido a la nueva incorporación ,Gema , a pesar de no contar aún ni con siete abriles ,tuvo el coraje y la entrega de un adulto para completar todo el camino .
El sol apareció y descubría los encantos de la sierra ,nos estimulaba , y así animados partimos con dirección al paraje del río Jandula , cantando las letras de “La Morenita” con el corazón palpitando a ritmo de la melodía ,orgullosos de saber de que todo transcurría según lo previsto .
Este segundo tramo lo vivimos intensamente, “La Señora” había decorado todos los caminos hasta el santuario adornando todas las plantas con sus primeras flores ; jara , romero ,margarita , labiérnago , lentisca y cornicabra ,lucían sus pimpollos pintando la sierra de colores agradables .
Los arroyos se presentaban sin apenas agua , tan solo el “pilar del madroño” escurría un pobre hilillo suficiente para rellenar nuestros frascos , aliviar nuestras gargantas y refrescar nuestros rostros acalorados por el esfuerzo .
Por fin ,teníamos el Santuario a la vista ,aunque para ser sincero debería decir ,”a la imaginación” púes la niebla espesa no dejaba ver nada desde el balconcillo cercano a la estatua erigida en honor a todos los peregrinos de la Morenita ,la silueta de la Virgen abierta en el corazón de la escultura ,por donde en los días esclarecidos se puede ver la Ermita aquel día solo mostraba el movimiento de nubes blancas y grisáceas .
Fueron dedicados varios vivas a la Virgen y reanudamos la marcha ,bajando mal que bien la cuesta del Madroño, atravesamos los llanos de alcornoques y encinas ,saludamos a otros compañeros de viaje de otras poblaciones y así hacia las diez y media de la mañana llegamos a
Lugar Nuevo, cruzamos el puente del Jandula ,sonrisa en boca y sin perder de vista a nuestros “escuderos motorizados” ,Jesús y José que abrían botellas para nosotros y el resto del clan.
Varías cervezas y un bocadillo bastaron para recobrar la entereza perdida durante el anterior trayecto ;
Nos enfrentamos a la última etapa desafiando a la conocida como “cuesta de los caracolillos”, varios descansos hubo antes de la llegada a las cercanías de la aldea del Santuario ,la hora no nos importaba ,José fiel cumplidor del código del guía leal ,como siempre, acompañaba a los que de los nuestros quedaban rezagados por diversos motivos .
Encarábamos la escarpada calzada de subida al santuario a eso de las doce y veinte minutos ,nuestros torturados pies daban fe de los veintiséis kilómetros recorridos ,ya gracias a Dios nada nos detenía ,en breve estaríamos con ella .
Muchos devotos fueron los que el Domingo ,se encontraban en el Santuario es por eso que la entrada al camarín se hizo esperar , como dicen nuestros mayores ,”paciencia que no hay otra ciencia” , y así aplicando ,por no tener más remedio, el saber popular ,pasamos varios minutos ,examinando la galería Mariana que antecede a la imagen ,
la estampa de la Virgen de la Natividad de nuestro pueblo nos anunciaba que poco faltaba para estar con ella ,en ese momento un escalofrío ,recorría todo nuestro sentir hasta que por fin ,la ves .
Ella desde arriba parecía conocer a todos los que pasábamos a su lado , Manuel ,Domingo ,Antonio , José ,Jesús , Gema ,Maria ,Pedro ,Maria Jesús ,Juan, Manolo ……………. , su cara : alegre después de escuchar los agradecimientos del hijo al que la preocupación que le afligía resolvió ,se tornaba triste cuando se enteraba de la desgracia de otro ,”La Morenita” todo lo puede ,la Señora nos daba su bendición, nos tranquilizaba , aliviaba el dolor y antes de alejarnos de ella, elevaba las mejillas y esbozaba una sonrisilla divina a modo de despedida .
Cuando estás cerca de la Morena, a la mente retornan ,las vivencias pasadas, buenas , malas ………… recuerdas a todos los que tu vida han perfilado, haciendo de ti lo que eres ,sientes de cerca a la que desde siempre tallada en oro ha colgado de tu cuello ,
la misma que adornaba la pared de ese rincón de tu casa ,esa a la que casi siempre recurres cuando el destino juega contigo a hacerlo difícil ,aquella que festejas desde que tienes uso de razón el último Domingo de Abril ,es inevitable emocionarse cuando todos los sentimientos se mezclan en el interior ,hasta que un ¡!VIVA LA VIRGEN DE LA CABEZA ¡! Gritado por alguno te hace retornar a la realidad .
El almuerzo de algunos de los que subimos andando se realizó en “Lugar Nuevo” ,cerca de la orilla del Jandula ,comimos asados ,ensalada ,y gracias a la caridad de los vecinos de “campamento” ,saboreamos algunos que otros “platos de cuchara” y como en los mejores banquetes tuvieron la caridad de ofrecernos también café y pasteles .
Jesús alegró más si cabe la tarde con decenas de bromas y chascarrillos “ valla rato de risa que nos hizo pasar” .
Finalizamos a media tarde ,recogimos todos los bártulos y camino de Jamilena ,seguimos cantando y contándonos las experiencias vividas en el camino .
(Agradecimientos a los conductores de los vehículos de apoyo ,Manuel ,Santos ,José y Jesús y a todos los que os habéis dejado fotografiar , muchas de las fotos no se las he incluido debido a la falta de luz o la poca calidad de la misma )
En esta ocasión el punto de encuentro como ya es tradición ,eran los alrededores del bar “el sordete” ,fueron muchos los que de Jamilena realizábamos peregrinación en ese día y aunque no todos los grupos salimos a la vez , tuvimos ocasión de vernos, conversar y desearnos suerte para el reto al que nos enfrentábamos .
El grupo con el que un servidor tuvo el gusto de recorrer las entrañas de Sierra Morena, fue el de José, en esta ocasión contaba con más miembros que siete días atrás debido a a la incorporación de varios peregrinos.
Consolamos nuestros estómagos con un desayuno ligero, y seguros de que “estábamos todos los que éramos” ,José entonó el particular grito de “guerra” ,utilizado por los “caminantes de La Morenita”,para hacernos saber que comenzábamos la marcha .
No hubo contratiempos, durante el primer tramo, nuestro particular enemigo, el frío, fue combatido avivando las piernas y pronto la ciudad cedió paso a la estampa serrana, con el cielo cargado de estrellas, aunque escondida a la vista por la madrugada ,pero evidenciada por los olores a pino ,romero , tomillo y las otras plantas que residen en la sierra .
Llegamos a San Ginés iluminados por la tenue luz del amanecer nos recibían miles de pajarillos que parecían saber de nuestra presencia pues trinaban alocados con los primeros rayos del sol.
En la llanura, se encontraban algunos miembros de la Peña Iliturgitana ”Peregrinos del Alba” ofrecían desinteresadamente diferentes alimentos para los que caminábamos; ,también el personal de “Protección Civil” atendía a aquellos andarines que hubieran sufrido algún percance ;
según fuimos informados posteriormente por uno de los miembros organizadores ,este es el tercer año que esta asociación peregrina organizan este evento con el objetivo de fomentar e inculcar el espíritu peregrino hacia el Santuario a jóvenes y a no tan jóvenes .
Los vehículos de apoyo y sus conductores,”fieles escuderos” que ese día fueron José y Jesús permanecían a la espera pacientemente, con todo preparado para el desayunar.
Comimos y bebimos hasta quedar satisfechos, el segundo tramo iba ha durar bastante y, debíamos estar bien alimentados para afrontarlo con energía .
Tras el descanso el grupo se vio de nuevo aumentado ,en este caso ,la media de edad ,que hasta el momento estaba entorno a los treinta años ,bajo de forma espectacular debido a la nueva incorporación ,Gema , a pesar de no contar aún ni con siete abriles ,tuvo el coraje y la entrega de un adulto para completar todo el camino .
El sol apareció y descubría los encantos de la sierra ,nos estimulaba , y así animados partimos con dirección al paraje del río Jandula , cantando las letras de “La Morenita” con el corazón palpitando a ritmo de la melodía ,orgullosos de saber de que todo transcurría según lo previsto .
Este segundo tramo lo vivimos intensamente, “La Señora” había decorado todos los caminos hasta el santuario adornando todas las plantas con sus primeras flores ; jara , romero ,margarita , labiérnago , lentisca y cornicabra ,lucían sus pimpollos pintando la sierra de colores agradables .
Los arroyos se presentaban sin apenas agua , tan solo el “pilar del madroño” escurría un pobre hilillo suficiente para rellenar nuestros frascos , aliviar nuestras gargantas y refrescar nuestros rostros acalorados por el esfuerzo .
Por fin ,teníamos el Santuario a la vista ,aunque para ser sincero debería decir ,”a la imaginación” púes la niebla espesa no dejaba ver nada desde el balconcillo cercano a la estatua erigida en honor a todos los peregrinos de la Morenita ,la silueta de la Virgen abierta en el corazón de la escultura ,por donde en los días esclarecidos se puede ver la Ermita aquel día solo mostraba el movimiento de nubes blancas y grisáceas .
Fueron dedicados varios vivas a la Virgen y reanudamos la marcha ,bajando mal que bien la cuesta del Madroño, atravesamos los llanos de alcornoques y encinas ,saludamos a otros compañeros de viaje de otras poblaciones y así hacia las diez y media de la mañana llegamos a
Varías cervezas y un bocadillo bastaron para recobrar la entereza perdida durante el anterior trayecto ;
Nos enfrentamos a la última etapa desafiando a la conocida como “cuesta de los caracolillos”, varios descansos hubo antes de la llegada a las cercanías de la aldea del Santuario ,la hora no nos importaba ,José fiel cumplidor del código del guía leal ,como siempre, acompañaba a los que de los nuestros quedaban rezagados por diversos motivos .
Encarábamos la escarpada calzada de subida al santuario a eso de las doce y veinte minutos ,nuestros torturados pies daban fe de los veintiséis kilómetros recorridos ,ya gracias a Dios nada nos detenía ,en breve estaríamos con ella .
Muchos devotos fueron los que el Domingo ,se encontraban en el Santuario es por eso que la entrada al camarín se hizo esperar , como dicen nuestros mayores ,”paciencia que no hay otra ciencia” , y así aplicando ,por no tener más remedio, el saber popular ,pasamos varios minutos ,examinando la galería Mariana que antecede a la imagen ,
la estampa de la Virgen de la Natividad de nuestro pueblo nos anunciaba que poco faltaba para estar con ella ,en ese momento un escalofrío ,recorría todo nuestro sentir hasta que por fin ,la ves .
Ella desde arriba parecía conocer a todos los que pasábamos a su lado , Manuel ,Domingo ,Antonio , José ,Jesús , Gema ,Maria ,Pedro ,Maria Jesús ,Juan, Manolo ……………. , su cara : alegre después de escuchar los agradecimientos del hijo al que la preocupación que le afligía resolvió ,se tornaba triste cuando se enteraba de la desgracia de otro ,”La Morenita” todo lo puede ,la Señora nos daba su bendición, nos tranquilizaba , aliviaba el dolor y antes de alejarnos de ella, elevaba las mejillas y esbozaba una sonrisilla divina a modo de despedida .
Cuando estás cerca de la Morena, a la mente retornan ,las vivencias pasadas, buenas , malas ………… recuerdas a todos los que tu vida han perfilado, haciendo de ti lo que eres ,sientes de cerca a la que desde siempre tallada en oro ha colgado de tu cuello ,
la misma que adornaba la pared de ese rincón de tu casa ,esa a la que casi siempre recurres cuando el destino juega contigo a hacerlo difícil ,aquella que festejas desde que tienes uso de razón el último Domingo de Abril ,es inevitable emocionarse cuando todos los sentimientos se mezclan en el interior ,hasta que un ¡!VIVA LA VIRGEN DE LA CABEZA ¡! Gritado por alguno te hace retornar a la realidad .
El almuerzo de algunos de los que subimos andando se realizó en “Lugar Nuevo” ,cerca de la orilla del Jandula ,comimos asados ,ensalada ,y gracias a la caridad de los vecinos de “campamento” ,saboreamos algunos que otros “platos de cuchara” y como en los mejores banquetes tuvieron la caridad de ofrecernos también café y pasteles .
Jesús alegró más si cabe la tarde con decenas de bromas y chascarrillos “ valla rato de risa que nos hizo pasar” .
Finalizamos a media tarde ,recogimos todos los bártulos y camino de Jamilena ,seguimos cantando y contándonos las experiencias vividas en el camino .
(Agradecimientos a los conductores de los vehículos de apoyo ,Manuel ,Santos ,José y Jesús y a todos los que os habéis dejado fotografiar , muchas de las fotos no se las he incluido debido a la falta de luz o la poca calidad de la misma )